Ya que MPEG usa eliminación de la redundancia, estos métodos de compresión se vuelven muy vulnerables ante la pérdida de información o errores en la decodificación.
Este fenómeno se ve amplificado por la propagación espacial y temporal.
Hace falta por lo tanto esquemas que controlen la propagación de las pérdidas o errores.Propagación espacial:
La pérdida de información o un error provoca la pérdida de toda la información del resto de la franja de vídeo.
No importa que inmediatamente después del error el resto de la franja se haya recibido correctamente, esta se perderá a partir del error.
La razón es que los macrobloques contienen información codificada diferencialmente con respecto a macrobloques anteriores (vectores de movimiento y coeficientes DC).Cuando se produce una pérdida de información o errores en alguno de los macrobloques, el resto de macrobloques pierden sus predictores.
Por lo tanto estos macrobloques deben ser descartados hasta el comienzo de la siguiente franja en la cual estos predictores son nulos al inicio de la franja.
Los puntos básicos de resincronización son las cabeceras de franja.
Propagación temporal:
Cuando un error se produce en una imagen tipo I, este se propaga en todas las imágenes del GOP hasta la llegada de la siguiente imagen I.Las imágenes P y B del GOP fueron codificadas con referencia a la imagen I.
Si los errores se producen en imágenes tipo P, las propagación temporal afectará a las imágenes tipo P y B que fueron codificadas con respecto a ésta.
Si los errores se producen en una imagen tipo B, aparecerá la correspondiente propagación espacial, pero esta no será propagada temporalmente a ninguna otra imagen, ya que las imágenes tipo B no son utilizadas como referencia para otras imágenes del GOP.
La propagación espacial y temporal de errores pueden provocar degradaciones de la calidad de vídeo hasta niveles inaceptables.
Si la pérdida de información o errores se producen a nivel sintáctico, como cabeceras de vídeo, la degradación puede ser mayor.
La degradación de la calidad de vídeo depende no sólo de la cantidad de la información errónea sino del tipo de información errónea y el lugar dónde esta información se corrompo.
Los errores de una imagen tipo I degrada más la calidad del vídeo que los errores en una imagen de tipo P, y esta a su vez, más que en una imagen tipo B, debido a la propagación temporal.